Cómo es un iaito de aluminio

Antaño, los maestros de la forja del lejano oriente se convertían en especialistas del metal. Así pues, para entrenar, los samuráis usaban otras armas menos dañinas, por ejemplo, el bokken de madera. Hoy en día, disponemos de gran tecnología que, por ejemplo, nos permite diseñar un iaito de aluminio, un material fantástico, muy ligero, ideal para la práctica del arte marcial.

El iaito de aluminio

Por lo general, el entrenamiento en artes marciales que requieren de una katana o espada japonesa suele centrarse en el uso del bokken, es decir, el arma, pero fabricada en madera de diversos tipos.

No obstante, también se puede usar un sable largo llamado iaito, que no tiene filo, y que es común en el entrenamiento del Iaijutsu y el Iaido, por lo que facilita un extenso estudio de sus técnicas y movimientos.

Para evitar riesgos, pero con la idea de que los movimientos sean idénticos a los que tendrían lugar en una lucha, se usa un iaito, que sustituye a la perfección en peso y dimensiones a la katana, pero cuyo filo no está afilado para que nadie sufra daños irreparables.

Ahora bien, hoy en día se diseñan iaitos de aluminio, algunos de ellos ultraligeros, por lo que, cuando se sostiene el arma, apenas se nota el peso de la misma, por lo que se entrena de lujo con ellos, aunque no simulen tan bien el peso de la espada japonesa original, hecho que debería hacer.

Luego, el resto del arma, aunque la hoja sea de aluminio, se diseña como cualquier otra. Por eso es necesario que se fije bien la empuñadura, que podrá ser de cualquier otro material. También ayuda que posea una saya o funda que, en cualquier caso, puede ser de material plástico, por ejemplo, aunque se recomienda que sea en madera.

Sea como fuere, recuerda cuidar siempre muy bien de tu iaito de aluminio para que esté en buen estado para uso y entrenamiento, desde la empuñadura o tsuka hasta la guardia o tsuba.

Imagen cortesía de MathKnight