Disciplina del Kendo

Dado que es un arte marcial de gran profusión, nos gustaría hoy centrar nuestra entrada en la disciplina del Kendo. Puesto que requiere de concentración, velocidad y reflejos, sus beneficios físicos y mentales son muy elevados.

Beneficios y disciplina del Kendo

Al practicar este arte marcial, existen ciertas aspiraciones que ayudan a aprovechar sus beneficios físicos y mentales por medio de la disciplina:

- Por un lado, tanto a nivel competitivo, como si lo practicas como forma de vida, se aspira a ser mejor y alcanzar el décimo dan, para lo que hay que mejorar y perfeccionar la técnica, una alegoría de la propia existencia humana.

- Requiere de un gran fortalecimiento de músculos, a la vez que se gana en habilidad, agilidad y reflejos, junto con el uso del bokken, que necesita de fuerza. Es más, el traje pesa unos 5 kilos.

- Se necesita una gran agilidad mental, puesto que hay que ser veloz para prever los movimientos del contrincante. Es decir, el tiempo de reacción es vital.

- El uniforme de Kendo es pesado, por lo que el kimono provoca calor. Así que, gracias a sus veloces movimientos y la sudoración, es un excelente ejercicio cardiovascular y aeróbico.

- Requiere de una gran disciplina para realizar los movimientos de forma correcta y bien marcados. Es decir, que hace falta una enorme concentración, motivación y perfección.

- El Kendo no es tanto una lucha, sino más bien una demostración de técnica. Para ello hace falta precisión y armonía física y mental.

- Lo cierto es que es un arte milenaria, por lo que cada practicante del Kendo, cuando se pone su uniforme y coge su sable de madera o bambú, es parte de una tradición de siglos, así que está sintiendo una verdadera filosofía de vida que exige disciplina en todas las facetas de su mundo, y no únicamente durante la práctica.

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Imagen cortesía de Yokota Air Base